En la mañana, estuve hasta las 11:00 AM m/m en la oficina ministerial, coordinando asuntos, disponiendo mi inminente salida a terreno. Tenía que estar a las 12:30, a más tardar, en el Instituto Chileno Norteamericano de Cultura, Moneda 1467. Allí me esperaba este fantástico grupo de trabajo, que constituimos para promover la Narracion Oral o Storytelling. Lo integran, del Comité de Bibliotecas del Norteamericano: Betty Johnson, Ximena Feliú, Ana María Prats, Ana María Villate y yo. Además de nosotras, también nos acompañan: Alejandro Palacios y Diego Álamos, a título de colaboradores artístico-musicales de una de las diversas presentaciones que hacemos. Nos encontramos en el Instituto a la hora convenida, y así nos subimos a la Van con destino el Colegio San Isidro de Linderos, cerca de Buin o Paine. La Van era blanca y espaciosa, el viaje fue breve y conversado. Ya habíamos sorteado otras jornadas en conjunto, y no parecíamos para nada nerviosas. Llegamos al Colegio San Isidro y fuimos recibidos atentamente por sus autoridades. Teníamos los segundos contados, entonces habilitamos el espacio, según nuestras preferencias. Por ejemplo, sacamos el mesón de sobre la tarima, rompiendo así un poco las fronteras entre el público y nosotros. Excelente asistencia, comenzamos con cerca de 80 personas.
La jornada empezó: Ana María Villate estuvo a cargo de presentarnos y, en eso, de dar cuenta de los peculiares enfoques que tenían cada una de nuestras “performances” lectoras. Betty Johnson leyó un ameno texto de alcances científicos. Ximena Feliú, a su vez, dio una clase magistral sobre arte. Llegó el turno de Ana María Prats y el cuento: “La Bruja Berta en Invierno”, en compañía de mi hijo Diego y Alejandro, artistas. ¡Cómo se unían texto, música e imagen! La lectura de Ana María Prats y la banda de música incidental armonizaban, el público acabó por convencerse de las potencialidades que tiene un texto escrito: su musicalización (música), puesta en escena (artes), su reescritura (lenguaje), etc. Al cabo, Ana María Prats y Ximena Feliú reprodujeron un diálogo escalofriante. ¡Se me puso la piel de gallina! Trató del naufragio del Titanic, en específico de por qué el capitán, teniendo aún espacio en su bote salvavidas, no fue a rescatar a los náufragos. Es duro de ver lo egoístas que nos ponemos ante el peligro…
Hecho esto, café de por medio, completamos la jornada de capacitación, haciendo grupos de trabajo, conversando los modelos a implementarse, el papel a tomar la lectura en el proceso formativo. Al vuelo, nos tomamos la Van de regreso. Yo, de luto por mi mamá, llevaba la cabeza un poco abombada, llena de cariñosos recuerdos. Todo había salido bien. El Comité de Bibliotecas del Norteamericano había hecho un trabajo prodigioso. Este grupo, según veo, cumple con creces el objetivo de promover la lectura, todas leen muy bien y se entregan, ¡no se imaginan cuánto he aprendido de Uds.! Íbamos en la Van, la Betty repartió pedazos de chocolate como premio para toda la comitiva.
Bello. Todo tu relato Constanza, se siente liviano, ameno, y de personas apasionadas por un tema que pienso, me hubiera gustado estar ahí para verlo y por otra parte, porqué se nos ha perdido ese hábito esa práctica de la lectura, que se puede ser tan fantástica.
ResponderEliminarEl mundo nos ha sacado del ritmo necesario para la lectura; las obligaciones, la aceleración; todo es rápido y breve. El tiempo de un libro, es mucho tiempo.
Anhelo disponer del tiempo y el ritmo calmo, para la lectura de buenos libros.
Saludos
Interesante tu trabajo de promover la lectura,no creo que exista actividad más enriquecedora que leer, especialmente en la niñez, Recuerdo esa colección denominada El Tesoro de la Juventud, dónde encontrabas historias como Azabache, Mujercitas, La Cabaña del Tío Tom, El País de los Matreros, Ivanhoe, Miguel Strogoff, y, así, las historias y relatos de Ch.Dickens, J. Verne, Sir Walter Scott, que van moldeando una personalidad humanista, porque todas esos viejos cuentos encerraban enseñanzas acerca del espiritu humano, el bien, el mal, la lucha por la supervivencia, y, tantas aventuras que llenaban la imaginación, Hoy la TV ha sustituído esa instancia, ofreciendo todos los mundos inimaginables , de forma directa, fácil, pasiva, castrando esas niñerías sentimentales de esas lecturas que menciono, extirpando ese humanismo que menciono, Buen desafío tienes frente a tí, hacer que la gente lea, y descubra lo placentero que resulta, las ventanas que se abren, y, todo el maravilloso mundo de la apertura de la mente..Estaré leyendote, y, dejando algun comentario sobre este tema que me apasiona, los libros, bibliotecas personales,y, afines.. saludos
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